¡Hola, lectores! ¿Cómo os han ido las vacaciones? Aquí aún tenemos una semana más de vacaciones, así que nos queda tiempo de disfrutar. Sin más dilación, os dejo la reseña de un libro que enseñé en mi último IMM: Willow.
Los padres de Willow murieron en un trágico accidente de coche, dejándola no solo con el dolor que supone enfrentarse a un pérdida, sino también con el peso de la culpabilidad: ella era quien conducía.
Ocho meses después, su hermano mayor casi no le habla, cree que sus compañeros de clase le culpan por lo ocurrido y Willow se evade del sufrimiento con el que carga marcando su cuerpo con las heridas del pasado. Pero cuando un chico llamado Guy descubra su secreto, nacerá una intensa relación que conseguirá sacarla de ese mundo extraño que ella misma se ha formado.
Julia Hoban es una escritora y actriz de Nueva York. Ha publicado varios libros para el público infantil, tanto novelas como obras de teatro.
Pero Julia Hoban logró el éxito internacional con esta novela, Willow, su primera enfocada a un público de carácter más juvenil y adulto.
Este libro llevaba en mi wishlist desde que me adentré en la Bloggosfera Literaria (hace unos 3 años), pero nunca me había decidido a leerlo, quedó en el olvido.
Pero hace unas semanas, mágicamente (conjunción astral, el hilo del destino...) me acordé de él, y en un arranque consumista, me hice con él (maldita comodidad de la compra por Internet...).
La primera imagen que transmite la sinopsis es la de "DRAMÓÓÓÓÓN", pero de vez en cuando me gusta sacar a pasear mi vena melodramática y leerme libros de este tipo.
Tras el accidente de coche que mató a sus padres, Willow se ha visto obligada a mudarse e irse a vivir a casa de su hermano mayor, con su mujer y su hija, y, aunque son gente encantadora y han acogido a Willow en su familia sin ninguna duda, ella no es capaz de rehacer su vida y de afrontar el dolor que supone haberse quedado huérfana.
Y como no es capaz de superar el dolor emocional, lo sustituye por dolor físico, recurriendo a la cuchilla
Esta es una de esas historias que te atrapa. No puedes evitar llevarla a terreno personal, sin importar la menor o mayor relación de los hechos de tu vida con los de la vida de Willow. Hay escenas de mucha tensión. Las escenas en las que Willow se corta te mantienen en vilo, y aunque realmente estés deseando cerrar el libro y encogerte en posición fetal mientras te coges de la muñeca, sigues leyendo. Como en las películas de terror en las que te tapas los ojos pero sigues mirando por las rendijas entre los dedos.
El personaje de Willow me ha gustado porque es una chica con mucho carisma, muy madura y con los pies en la tierra. Todo el dolor que tiene dentro ha hecho que su vida diese un giro radical y que cambiase por completo su visión del mundo. Me ha encantado la relación que tiene con Guy. Guy (sí, un chico que se llama "Chico") y Willow se conocen en una biblioteca, y es un libro, Tristes Trópicos, lo que les une. Guy se convierte en su confidente, la única persona en quien Willow es capaz de confiar. El amor no surge entre ellos a los cinco minutos de conocerse, como suele pasar en la mayoría de novelas juveniles de hoy en día, sino que es algo que surge más tarde, que se queda en un segundo plano hasta que son conscientes de ello, de que está ahí. Y sus charlas sobre literatura me enamoraban, me han dejado con ganas de leer La Tempestad, de Shakespeare.
Y así, poco a poco, será Guy quien consiga sacar a Willow de su propio mundo de culpabilidad.
Pese a que los protagonistas principales me encantaban, los secundarios me aburrían. Eran demasiado sosos, demasiado planos. Vale que son secundarios, no son lo más importante de la historia, pero los veía demasiado superficiales. Aun así, cumplen con su función dentro de la historia.
Me ha gustado la escritura de la autora. O lo que he podido vislumbrar de ella, ya que estaba totalmente enterrada bajo una traducción penosa y horrible: había frases inconexas, expresiones sin sentido, párrafos repetidos pero con una traducción diferente... No lo entiendo. No entiendo que una editorial con cierta fama publique libros penosamente traducidos y con las tapas de la cubierta que se caen a pedazos.
Es una historia preciosa que se ha desmoronado en el final. Todo pasa rapidísimo, está cogido con pinzas. La historia de desenlaza en unas pocas páginas. El final, los hechos en sí, me han gustado, pero la autora podría haberse extendido más, y así habría sido un final perfecto para esta historia.
Título: Willow
Autora: Julia Hoban
Editorial: Ámbar
Encuadernación:penosaTapa blanda con solapas
Nº de páginas: 335
Fecha de publicación: Septiembre de 2009
Precio: 15€
Los padres de Willow murieron en un trágico accidente de coche, dejándola no solo con el dolor que supone enfrentarse a un pérdida, sino también con el peso de la culpabilidad: ella era quien conducía.
Ocho meses después, su hermano mayor casi no le habla, cree que sus compañeros de clase le culpan por lo ocurrido y Willow se evade del sufrimiento con el que carga marcando su cuerpo con las heridas del pasado. Pero cuando un chico llamado Guy descubra su secreto, nacerá una intensa relación que conseguirá sacarla de ese mundo extraño que ella misma se ha formado.
Julia Hoban es una escritora y actriz de Nueva York. Ha publicado varios libros para el público infantil, tanto novelas como obras de teatro.
Pero Julia Hoban logró el éxito internacional con esta novela, Willow, su primera enfocada a un público de carácter más juvenil y adulto.
Este libro llevaba en mi wishlist desde que me adentré en la Bloggosfera Literaria (hace unos 3 años), pero nunca me había decidido a leerlo, quedó en el olvido.
Pero hace unas semanas, mágicamente (conjunción astral, el hilo del destino...) me acordé de él, y en un arranque consumista, me hice con él (maldita comodidad de la compra por Internet...).
La primera imagen que transmite la sinopsis es la de "DRAMÓÓÓÓÓN", pero de vez en cuando me gusta sacar a pasear mi vena melodramática y leerme libros de este tipo.
Tras el accidente de coche que mató a sus padres, Willow se ha visto obligada a mudarse e irse a vivir a casa de su hermano mayor, con su mujer y su hija, y, aunque son gente encantadora y han acogido a Willow en su familia sin ninguna duda, ella no es capaz de rehacer su vida y de afrontar el dolor que supone haberse quedado huérfana.
Y como no es capaz de superar el dolor emocional, lo sustituye por dolor físico, recurriendo a la cuchilla
Esta es una de esas historias que te atrapa. No puedes evitar llevarla a terreno personal, sin importar la menor o mayor relación de los hechos de tu vida con los de la vida de Willow. Hay escenas de mucha tensión. Las escenas en las que Willow se corta te mantienen en vilo, y aunque realmente estés deseando cerrar el libro y encogerte en posición fetal mientras te coges de la muñeca, sigues leyendo. Como en las películas de terror en las que te tapas los ojos pero sigues mirando por las rendijas entre los dedos.
El personaje de Willow me ha gustado porque es una chica con mucho carisma, muy madura y con los pies en la tierra. Todo el dolor que tiene dentro ha hecho que su vida diese un giro radical y que cambiase por completo su visión del mundo. Me ha encantado la relación que tiene con Guy. Guy (sí, un chico que se llama "Chico") y Willow se conocen en una biblioteca, y es un libro, Tristes Trópicos, lo que les une. Guy se convierte en su confidente, la única persona en quien Willow es capaz de confiar. El amor no surge entre ellos a los cinco minutos de conocerse, como suele pasar en la mayoría de novelas juveniles de hoy en día, sino que es algo que surge más tarde, que se queda en un segundo plano hasta que son conscientes de ello, de que está ahí. Y sus charlas sobre literatura me enamoraban, me han dejado con ganas de leer La Tempestad, de Shakespeare.
Y así, poco a poco, será Guy quien consiga sacar a Willow de su propio mundo de culpabilidad.
Pese a que los protagonistas principales me encantaban, los secundarios me aburrían. Eran demasiado sosos, demasiado planos. Vale que son secundarios, no son lo más importante de la historia, pero los veía demasiado superficiales. Aun así, cumplen con su función dentro de la historia.
Me ha gustado la escritura de la autora. O lo que he podido vislumbrar de ella, ya que estaba totalmente enterrada bajo una traducción penosa y horrible: había frases inconexas, expresiones sin sentido, párrafos repetidos pero con una traducción diferente... No lo entiendo. No entiendo que una editorial con cierta fama publique libros penosamente traducidos y con las tapas de la cubierta que se caen a pedazos.
Es una historia preciosa que se ha desmoronado en el final. Todo pasa rapidísimo, está cogido con pinzas. La historia de desenlaza en unas pocas páginas. El final, los hechos en sí, me han gustado, pero la autora podría haberse extendido más, y así habría sido un final perfecto para esta historia.
4/5
Muy recomendable.
5 comentarios:
También lo quiero desde hace años! definitivamente se ve genial
Besos
Le tengo unas ganas terribles dicen que es una historia muy triste y no me vendría nada mal cambiar de aires que últimamente sólo leo fantasía. Un toque de realidad nunca viene mal.
Le tengo muchas ganas desde hace bastante tiempo; y la verdad que espero poder leerlo pronto.
¡Gracias por la reseña! :)
Un beso. ^^
Este libro es hermoso, uno de mis favoritos. En serio tienen que leerlo.
No habia escuchado antes de este libro y definitivamente me has dejado con ganas de leerlo. Me encanto tu reseña, gracias.
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