Reseña: El cuaderno de Maya

¡Hola a todos!
Por fin han llegado las vacaciones de Navidad, ahora toca disfrutar de la familia, los dulces, los regalos y sobre todo, de buenas lecturas. De momento, yo os dejo una reseña.

Título: El cuaderno de Maya
Autor: Isabel Allende
Editorial: Debolsillo
Encuadernación: tapa blanda
Nº de páginas: 430 páginas
Fecha de publicación: mayo de 2012
Precio: 12'95 € (9'95 a partir de enero)

Un pasado persiguiéndola
Un futuro aún por construir
Y un cuaderno para escribir toda una vida

«Soy Maya Vidal, diecinueve años, sexo femenino, soltera, sin un enamorado, por falta de oportunidades y no por quisquillosa, nacida en Berkeley, California, pasaporte estadounidense, temporalmente refugiada en una isla al sur del mundo. Me pusieron Maya porque a mi Nini le atrae la India y a mis padres no se les ocurrió otro nombre, aunque tuvieron nueve meses para pensarlo. En hindi, maya significa "hechizo, ilusión, sueño". Nada que ver con mi carácter. Atila me calzaría mejor, porque donde pongo el pie no sale más pasto.»

Isabel Allende es una escritora chilena nacida en Perú, el 2 de agosto de 1942.
Es una de las escritoras más famosas internacionalmente de lengua hispana. Ha recibido varios premios entre los que se encuentra el Premio Nacional de Literatura de Chile. Y desde 2004 es miembro de la Academia Estadounidense de las Artes y las Letras.

El cuaderno de Maya es una novela de la que me he enamorado completamente, pese a tener unas 400 y pico páginas la novela se lee rapidísimo porque la protagonista del libro no os dejará descansar en ningún momento, siempre estará metida algún lío.
La novela podemos dividirla en dos partes que se van alternando, por un lado, la vida de Maya en Chiloé, una isla de Chile aislada de todo el mundo donde se ha visto obligada a huir de la mafia y el FBI. Y por otro lado, la historia que cuenta en su diario mientras está en la isla, donde conocemos su vida desde su infancia hasta la actualidad, donde tiene 19 años, y los motivos que la llevaron a huir de EEUU y refugiarse en una isla sin comunicarse con nadie, exceptuando los pocos habitantes de la isla.

Si hay que destacar algo de esta novela, sin duda alguna, son los personajes. Son personajes muy humanos y reales. La escritora profundiza en la historia de cada uno de ellos a través de los ojos de Maya, y esto hace que les cojas cariño enseguida, especialmente, a sus abuelos y a Manuel Arias (con el que se queda durante su estancia en Chiloé), lo que me pude reír con algunas cosas de Nini (su abuela), es una mujer genial.
Y por supuesto, Maya es el mejor de todos. Es una chica muy peculiar, cuando os digo que le pasa de todo, creedme. Una de las partes que más me gustó del libro es cuando en un momento de su adolescencia viaja hasta Las Vegas y se mete en drogas, alcohol y asuntos un tanto peligrosos. Se puede apreciar como la adicción puede con ella y me impactó, y gustó a la vez, ver como las drogas influyen en ella. En serio, es un personaje que me encantó.

Y bueno, de la parte de la isla, si habéis leído otros libros de Isabel Allende, sabréis que suele incluir en sus libros escenas relacionadas con la historia y las tradiciones chilenas. Pues en este libro no iba a ser menos, por ejemplo, hay un día que se celebra en Chiloé una tiradura de casa, que consiste en arrastrar una casa por animales hasta el mar. Esta es una tradición que existe de verdad, y me pareció muy curiosa.

Quizá lo que me faltó en el libro fue un poco más de amor, que lo hay, pero mi vena romanticona es muy exigente y quiso más, pero esto es ya cosa mía y de mi parte romántica.

La forma de escribir de Isabel Allende es muy cercana y además tiene siempre ese aura de misticismo tan característico de sus novelas que me atrapó completamente mientras leía, son solo detalles pero me gustó. Creo que leeré más libros suyos aprovechando que mi madre tiene casi todas sus novelas.
Y bueno, acabo la reseña recomendando que lo leais, ahora que se acercan las vacaciones navideñas, es un buen libro para leer o regalar.

 5/5